EL MAPA NO ES EL TERRITORIO es uno de los postulados de PNL (Programación Neurolinguística) que a mi entender mejor abre la puerta al entendimiento humano.
De la misma forma que cuando vamos a un lugar desconocido necesitamos de un plano para movernos por él, tambien en la vida utilizamos un plano, un mapa en el que en lugar de calles y plazas aparecen nuestras vivencias, nuestros valores y creencias y que nos ayudan a manejarnos en nuestro día a día.
El problema viene de pensar que todas las personas tenemos el mismo plano. Ni siquiera dos personas que convivan o hayan convivido muy estrechamente lo comparten. Hermanos incluso gemelos, parejas, compañeros de aventuras, todos absolutamente todos tenemos un mapa diferente.
Y como se estructura ese mapa??. Desde nuestro nacimiento, tenemos experiencias de las que vamos extrayendo conclusiones que nos llevan a actuar de una determienda forma y que van consolidando nuestras crencias sobre ello. A su vez, vamos interactuando con diferentes personas que nos dejaran un poso u otro dependiendo del significado que le demos, y asi configuramos ese plano, ese cristal a traves del cual vemos la realidad.
El darnos cuenta de que trás opiniones diferentes se esconden mapas diferentes nos permite ampliar la mirada, si intentamos adivinar que hay ahí, en el plano de enfrente, podemos mejorar nuestro entendimiento y comunicación. Y sin renunciar a nuestras ideas tendremos más capacidad de entender las otras y a partir de ahi observar que puntos de confluencia podemos encontrar.
Unas veces nuestra opinión saldrá reforzada y en otras quizás encontremos errores en nuestros planteamientos. Tener la suficiente capacidad de retroceder y aceptar nuestra equivocación nos hace ser más flexibles, aptitud muy conveniente para llevar una vida más feliz
